Origen del Mapuche

El relato del diluvio:

El Origen de los Mapuches

Debe haber sido hace muchos años; ellos tenían más de cien años cuando fallecieron y yo tengo mucho más de setenta. Pero era lo que me conversaban mis abuelos. Hubo una gran agua, el mar se salía, se desbordaban los ríos y se llenaron todos los campos. Ellos se salvaron porque se subían a los cerros. Y hacían cantaritos que se ponían en la cabeza porque la lluvia era muy fuerte. Y aquí llovió más de tres meses sin parar. Y murieron los animales, los chanchos y las gallinas. Y las casas fueron llevadas por el agua. Entonces ellos arriba del cerro hicieron una oración y le pidieron al Señor que no lloviera más. Entonces hicieron un Nguillatún para poder calmar el agua, y seguramente nuestro Señor los escuchó porque se calmaron las aguas. Todos los mapuche se subieron a un cerro que queda al otro lado del Bío-Bío y de allí después se esparcieron por la tierra y la poblaron.

Así comenzaba a contarnos la historia del pueblo mapuche un anciano y culto descendiente de los caciques de Malleco. El diluvio indica el comienzo de los tiempos. Al parecer, no hay noticias en su cultura acerca del origen del hombre y del mundo, de los primeros habitantes, de cuándo y cómo llegaron. El relato del diluvio es el mito original de un pueblo ya establecido en las regiones del sur, cuya vida como nación -poblar la Tierra- comienza a partir de esa catástrofe.

La historia de los pueblos que habitan hasta hoy estas tierras de Chile, comienza con la lucha feroz de los elementos desatados. El mar, el agua y la montaña, elementos centrales de esta geografía, aprisionan al hombre como entre dos tenazas, el Mal y el Bien, disputándose estas estrechas tierras. Los sobrevivientes fundan el pueblo, los que han muerto se han transformado en rocas y objetos de la naturaleza. Hombre y naturaleza,  religión , cultura  y  sociedad, vida y muerte, objetos vivos e inertes, surgen

de este mismo memento fundador. (1)

 

Allá en el mar, en lo más profundo Vivía una gran culebra que se llamaba Cai Cai.
Las aguas obedecían las órdenes del culebrón Y un día comenzaron a cubrir la tierra.
Había otra culebra tan poderosa como la anterior Que vivía en la cumbre de los cerros.
El Ten Ten aconsejó a los mapuche Que se subieran a un cerro Cuando comenzaran a subir las aguas.
Muchos mapuche no lograron subir al cerro Y murieron transformándose en peces.
El agua subía y subía, Y el cerro flotaba y también subía y subía; Los mapuche se ponían los cantaritos sobre las cabezas Para protegerse de la lluvia y el sol; Y decían:
Cai, Cai, Cai;

Y respondían:
Ten, Ten, Ten;
 

poblaron la tierra.
Así nacieron los mapuche (2).

Esta variante del mito original de los mapuches muestra los mismos elementos: el pueblo nace de un gran cataclismo, de una lucha poderosa entre los elementos desatados, las aguas del mar y los volcanes de la cordillera, marco telúrico que lo circunscribe físicamente, realidad reiterada de maremotos, terremotos y erupciones volcánicas (3)

Después del relato del diluvio, la historia de los mapuche se interrumpe largos años, retomándose con la llegada de los españoles, a partir de la cual se van entremezclando versiones hasta llegar a épocas en que la lectura puede apoyar la memoria, y las historias aprendidas en la escuela, reforzar, confundir y, muchas veces, hacer olvidar la tradición oral.

(1) El padre Diego de Rosales, en su Historia General, trae una versión de este mito originario; el abate Juan Ignacio Molina, en su compendio de la Historia Civil del Reyno de Chile, trae una completa versión que es reproducida por diversos autores. En la tradición oral mapuche un buen relato completo de la historia del pueblo comienza con el mito de origen. Respetamos esa tradición. "Historia del Pueblo Mapuche", José Bengoa, 1985, pág. 9.

(2) Relato recogido cerca de Purén. La parte del relato que señala lo que los mapuches decían, es acompañada con movimientos de las manos y sonidos como de lluvia que cae sobre el techo (o cantaritos), y que responde la gotera en la tierra: "ten, ten, ten". "Historia del Pueblo Mapuche", José Bengoa, 1985, pág. 10.

(3) Hay algunos relatos producto del contacto con españoles y misioneros católicos. Se cuenta el relato bíblico del origen del mundo, del paraíso y en general la versión judaica cristiana, adicionándole elementos autóctonos. "Historia del Pueblo Mapuche", José Hicieron sacrificios y se calmó el agua, Y los que se salvaron Bajaron del cerro y Bengoa, 1985, pág. 10.