EL BOLERO
El bolero es un cajón de sastre porque en él confluyen muchos géneros vigentes en el siglo XIX, como el aria de ópera y la canzonetta napolitana. Durante el siglo XX recibe la influencia del foxtrot.
Primer bolero conocido: Tristeza, del compositor cubano Pepe Sánchez en 1883. Según otras fuentes sería de 1885 En el siglo XVIII existió un género español (quizás con influencia gitana) llamado bolero, que era bailado, pero en tres tiempos. No se ha descubierto ninguna relación con ese baile español, pero se sabe que tenía cierto virtuosismo, agilidad de donde vendría el término 'bolerear', que se refiere al hecho de hacer mucha filigrana, con movimiento, y en el bolero el acompañamiento en la guitarra tiene eso también, pero son sólo hipótesis.
Puente entre la música del siglo XIX y la del XX. Su nacimiento está vinculado a la independencia de Cuba de España. El bolero es una canción que se canta a la mujer, pero que se relaciona a ésta con la patria. Pero también fue arma de combate social para los negros antillanos y líderes eclesiásticos lo persiguieron por revolucionario y pecaminosos.
Cuba y México: a finales del siglo XIX, giras de compañías teatrales o de circos, espectáculos para los cuales el aspecto musical resultaba relevante. A Cuba llegaban circos mexicanos, con músicos que traían la canción yucateca - de la península de Yucatán -, una canción netamente romántica. La influencia se revierte cuando el bolero llega a México a finales de los años 20 y comienzos de los años 30 en gloria y majestad desde Cuba. Primer bolero moderno: Aquellos ojos verdes, de Nilo Menéndez, compuesto en 1929. En esa época empiezan a grabarse los primeros boleros en Nueva York. Los Lecuona Cuban Boys difunden el bolero cubano por el mundo, llegan a Chile. Otros: El Trío Matamoros integrado por Miguel Matamoros, Rafael Cueto y Siro Rodriguez. Barbarito Diez, quien combinando el bolero con el danzón perpetuó su voz: Las perlas de tu boca, Dulce embeleso, y Tú qué has hecho, Si llego a besarte. René Cabel, denominado el ‘Tenor de las Antillas’, fue otro de los grandes que se impuso, dejando un extenso repertorio, con él se inició la era de los ‘tenores boleristas’ donde una voz gruesa marcaba la pauta: Despecho, Amigo, Irremediablemente solo, Palabras de mujer, etc).
Bolero mexicano: La influencia negra se pierde en México, pero se enriquece con la orquestación. Luego recibe el aporte de la música norteamericana a través del swing en el acompañamiento, en la armonía: más tensional, con más disonancia. 1º bolero en México: Presentimiento de Pedro Mata y Emilio Pacheco. Compositores: Agustín Lara (descubierto por Arvizú), María Grever (María Joaquina de la Portilla Torres, 1884-1951: Bésame mucho de 1941 y Júrame), Alberto Domínguez, Consuelo Velásquez. En los años 30 era interpretado por voces líricas, por tenores o barítonos, como es el caso de Juan Arvizú, Pedro Vargas, Tito Guizar, José Mojica (+1974), Alfonso Ortiz Tirado, Guty Cárdenas. Mujeres: Toña la Negra (Antonia del Carmen Peregrino, 1912-82). Ellos proyectaban su voz trabajada y potente porque no se empleaba el micrófono, entregando un bolero similar a las grabaciones realizadas hoy por el tenor Plácido Domingo. Bolero orquestal: implica una producción más costosa, en los años 40 y 50 estaba circunscrito a hoteles, salones de baile, a los cuales asistían los sectores más acomodados. Se difunde por medio del cine, el disco y presentaciones en vivo (¿estimulado por la caída del tango tras morir Gardel?). En los 40: Benny Goodman graba Perfidia y Frenesí de Domínguez.
Nueva influencia de México a Cuba en el área del bolero: Trío Los Panchos, en los años 40. José Jesús (Chucho) Navarro (1913-93), médico y guitarrista aficionado, integró el grupo de Felipe Gil y los Caporales con Gil y Ancona, sustituido éste después por Alfredo Bojalil Gil (1915-99). Cantaron en Nueva York contratados por CBS hasta 1944. Entonces Alfredo Gil, Chucho Navarro y el portorriqueño Hernando Avilés (Herminio Avilés Negrón, 1914-86, aprendiz de peluquero) formaron el Trío Los Panchos, presentado por primera vez en el Teatro Hispano de Nueva York. El nombre proviene de los "panchos" Pancho Villa, Pancho Pistolas y Francisco Madero. Gran éxito por cuatro años en Nueva York, donde impusieron el estilo de canto a 3 voces, con 3 guitarras, entre las cuales incorporaron una guitarra más pequeña, que se llama requinto, para hacer una contramelodía al canto, creada por Gil. Además, marcan el predominio del bolero mexicano sobre el cubano o el portorriqueño en América Latina. Popularizan el bolero de trío. En el bolero cubano normalmente en los interludios, cuando no se está cantando, se toca la misma melodía del canto en la guitarra. Pero uno de los aportes de Los Panchos es la contramelodía que tocan en la introducción, en el interludio y también doblan a la línea melódica que se destaca al ser interpretada con el requinto, instrumento que permite floreos y ornamentaciones propias de ese estilo manierista que tiene el bolero. Pudieron ser improvisados en un comienzo, pero se han ido estandarizando y se han incorporado a la canción. En Chile se presentaron el año 51 en el cine Baquedano. En ese año siguiente se retiró Avilés y se incorporó el boliviano Raúl Shaw Moreno (Raúl Shaw Boutie, 1925) por un año. 1952-56: Julio Rodríguez Reyes (portorriqueño, 1927); 1956-58: Hernando Avilés por 2ª vez.
En 1958 se incorpora Johnny Albino (Juan Albino, portorriqueño, 1917). 1964: nueva etapa de éxitos tras grabar con la cantante turca-norteamericana Eydie Gorme boleros de María Grever, Bobby Collazo, Isolina Carrillo y José Alfredo Jiménez. A partir de entonces, realizan diversas grabaciones con otros cantantes, usando técnicas fonográficas modernas. Albino se retira (con disputas) en 1968 y se incorpora el mexicano Enrique Cáceres hasta 1972. Le sucede Ovidio Hernández, el cual fallece en 1976. Lo sustituye Rafael Basurto Lara (sobrino de Agustín Lara, 1941.
El Trío Los Panchos se termina en 1981, tras el retiro de Alfredo Gil. A partir de ese momento, Chucho Navarro y Rafael Basurto se asumieron como dúo Los Panchos con diversos requintistas invitados (Willy Fonseca, Eladio Ayala, José Luis Sánchez Camacho, Gabriel Vargas Gil). Años 90: tercera oleada de éxitos, Los Panchos acaban con la muerte de Chucho Navarro, tras lo cual Rafael Basurto y Jesús Navarro junior se han visto envueltos en querellas por la formación de sendos conjuntos que pretenden el nombre.
En los años 40 mejora la tecnología y se comienza a utilizar el micrófono, de modo que ya no se necesitan esas voces potentes; al mismo tiempo, permite hacer una interpretación más cristalina, más íntima, más sensual. Representante: Lucho Gatica, el bolero casi declamado. Otros chilenos de esa época: Raúl Videla, Arturo Gatica, Mario Arancibia. Otros: Leo Marini (pionero del bolero en Argentina). Se transforma en un género a través del cual América Latina se incorpora a la modernidad en esos años.
- Por un lado, el rol de la mujer en el bolero, si se compara con el tango, aparece de igual a igual con el hombre, el discurso amoroso en el bolero es ambiguo, donde los géneros no están claros, hay una cierta emancipación de la mujer o se establece una forma moderna de amar, como lo plantean algunos autores, donde hay una igualdad entre los sexos, producto de la ambigüedad de la letra.
- Rompió con ciertos tabúes y convenciones del siglo XIX al propiciar el acercamiento físico entre el hombre y la mujer: el lenguaje de los cuerpos. Hay un movimiento que es lento, que invita al detalle, al contacto directo. Por la influencia africana se da esta sensación más sensual, explica González.
- Otro rasgo tiene que ver con el modernismo literario de Rubén Darío, es decir, en el bolero, señalan algunos autores, se masifica o populariza este modernismo, este preciosismo, esta imagen lírica elaborada del modernismo literario.
En los 50 (Chile): Mario Clavel, Olga Guillot, Eduardo Farrel. Tras el embate del rock'n roll, en Chile ha permanecido en un circuito marginal, con un tipo de voz que instalan Los Panchos. Es una voz sensible, muy afectada. Es el bolero que se observa en el cine de Almodóvar. En Chile: Lucho Barrios (peruano avecindado en Chile), Luis Alberto Martínez, Ramón Rimac, Ramón Aguilera, Lorenzo Valderrama y Palmenia Pizarro. Hay una sensibilidad del pueblo latinoamericano con pocos elementos: un par de guitarras, una maraca, es decir, una producción de bajo costo. Sus exponentes son grupos que interpretan otros repertorios, como tonadas chilenas, guaraníes paraguayas, valses peruanos. Esta forma es la que se sigue tocando en el Mercado Central de Santiago, y en bares de Valparaíso. Boleristas de capa caída se "radicaron" en Chile gracias a las trabajadoras del sexo y cultivaron el bolero "achorado".
Letras: a pesar de presentar una temática dramática, también le canta al éxtasis del amor, al enamoramiento, a la parte positiva de la relación, pero siempre en puntos extremos: la dicha absoluta o el cortarse las venas.
Influye sobre canción ranchera y surgió el bolero ranchero. El bolero feeling es una versión influida por la armonía jazzística norteamericana; de esta línea saldrá Pablo Milanés, el joven del feeling. En Estados Unidos aparece el beguiné, con Cole Porter, que es en el fondo la respuesta a esa rica relación musical que tenían Cuba y Estados Unidos, de la misma forma que la tenían Cuba y México. Paul McCartney, gran admirador de Lucho Gatica, compuso canciones con ritmo de bolero e incluso con acompañamiento de maracas para los Beatles. Sub géneros: Bolero rítmico, Bolero Cha cha cha, Bolero Mambo, o inclusive la Bachata (bolero Dominicano), el Bolero Ranchero (mezcla bolero y mariachi mexicano) y el Bolero Moruno (bolero con mezclas gitanas e hispánicas). Heredera del bolero es también la actual balada romántica que la industria discográfica ha difundido por toda América Latina.
Armando Manzanero (1935): fue pianista de la orquesta mexicana que acompañaba a Lucho Gatica. Fue él precisamente quien lo impulsó a tener una carrera como solista.
Cierto aislamiento cultural de América Latina en los años cercanos y posteriores a la primera guerra mundial, que no permitió a estos países integrarse a la era llena de influencias musicales que no fueran el vals, el pasodoble o el fox -trox, venidos de Europa o los Estados Unidos, permitió al Bolero cultivarse y desarrollarse con calma sin claras competencias que lo amenazaran, destacamos también que los países ‘influyentes’ no estaban interesados en vendernos su cultura y sus gustos, solo mostraban interés porque América Latina les comprase sus productos. A su vez, la existencia de regímenes militares de facto, influyó curiosamente en el éxito del bolero, pues a estos gobiernos les interesaba ver a la población entretenida en sus gustos, para que olvidaran la política, por ello la era dorada del Bolero está asociada en gran parte al periodo de las dictaduras de la década de los cincuenta. Asimismo la difusión de ídolos por medio del cine le dio una difusión y vigencia enorme al Bolero. Pero cuando América Latina rompió su relativo aislamiento cultural después de la segunda guerra mundial y se integró a un mundo competitivo y cosmopolita de influencias, el bolero decayó.
En Chile: Fue El Indio Araucano – Osvaldo Gómez – el pionero del género dejando piezas inmortales como: Te odio y te quiero, Un viejo amor, Cuando muere la noche, Amor se escribe con llanto, etc. Otros intérpretes como Lucho Gatica. Sonia y Myriam tuvieron éxito en México, también Antonio Prieto (todos acompañados por orquesta). Otros: Los Huasos Quincheros (popularizan Nosotros, de Pedro Junco); Trío Los Hermanos Arriagada (Poema, Pecado, Qué cosas te hice yo, Sigamos pecando, Esta tarde vi llover, Quisiera, Mar y cielo , etc.); Los Angeles Negros (Angelitos negros, Usted, Esta noche la paso contigo, etc.). Compositores: Francisco Flores del Campo y Armando González, autores de boleros de resonancia continental. Hoy: Carmen Prieto, quien de alguna manera retoma el estilo cubano, más sensual de la interpretación, y es un ejemplo del interés de la juventud por el bolero.
Conjuntos juveniles latinoamericanos con influencias del bolero: Café Tacuba en su disco Re, tiene un brevísimo bolero llamado Madrugal, parodia de Los Panchos. Los Aterciopelados con un tema titulado Bolero falaz. Los Tres en su primer disco presentan canciones influidas en el uso de la guitarra", explica González. En Chile, la actual exponente de este género es la cantante
OTROS COMPOSITORES
Rafael Hernández, después de Lara es el que más composiciones dejó al mundo latinoamericano del bolero, con un estilo lleno de sencillez expresaba lo que habitualmente debía ser complejo para un poeta, allí radico su triunfo. Enamorado de ti, No me quieras tanto, Tu no comprendes, Amigo, Despecho, Silencio, Celos malditos celos, Canción del Dolor, Ahora seremos felices, Perfume de gardenias, Ausencia, Lo siento por ti, Preciosa y Lamento borincano.
Pedro Flores, puertorriqueño: Despedida, Perdón, Irresistible, Esperanza inútil, Amor, Bajo un palmar, Amor perdido, Obsesión, Si no eres tú y Linda.
Otros: César Portillo de La Luz, cubano (Contigo en la distancia, Delirio), Consuelo Velásquez, mexicana (Aunque tengas razón, Amar y Vivir, Corazón, Que seas feliz, Enamorada), Gabriel Ruiz, mexicano (Usted, Desesperadamente, Amor amor amor, Tentacion), Roberto Cantoral, mexicano (El reloj, La Barca, Soy lo prohibido, El Triste). Oswaldo Farrés (Toda una Vida, Acércate más, Tres palabras, Quizás quizás quizás), Gonzalo Curiel, mexicano (Vereda Tropical, Un gran amor y Traicionera), Mario y Benito de Jesús (Nuestro Juramento y Ya la pagarás), Alvaro Carrillo (Se te olvida, Sabor a Mi y Amor mío), los cubanos Orlando de La Rosa (No vale la Pena y Vieja Luna) y Gonzálo Roig (Quiéreme mucho y Estás en mí), el puertorriqueño Bobby Capó (Piel canela, Cabaretera, En que qué damos por fin), el argentino Mario Clavel (Abrázame así, Somos, Quisiera ser), y los venezolanos Aldemaro Romero (Me queda el consuelo), María Luisa Escobar (Desesperanza, No puedo olvidarte), Chelique Sarabia (Mi propio yo y Cuando no sé de ti), José Reyna (Noche de Mar, Ven), Jhony Quiroz (Tú Sabes, Hastío) y René Rojas (Sufre Mujer, Evocación, Anoche te amé).